Por Luis E. Gómez
Las formas d producción de la industria automotriz y la organización de sus procesos de trabajo se han modificado enormemente gracias a las innovaciones flexibles que han permitido la electrónica y la robótica principalmente.
Sin embargo, el automóvil de hoy sigue siendo el mismo en sus principios más generales, que el automóvil de ayer…
El automóvil es un conjunto de sistemas articulados en torno al motor, fuente principal de su potencia: Sistema motriz, sistema de transmisión y embargue, sistema de dirección, sistema de rodamiento, sistema de frenos, sistema de suspensión, sistema eléctrico.
Sistemas todos, montados sobre un chasis y ensamblados dentro de una carrocería conteniendo los instrumentos de manejo, así como los asientos de los pasajeros y del conductor.
El motor general el movimiento que se dirige a las ruedas mediante la transmisión, que debe incluir una caja de cambios de marcha (que no de velocidades) automática o mecánica ay un embarque que permita dichos cambios y también mantener al auto encendido mientras se encuentra parado. La dirección comanda las ruedas delanteras y puede ser hidráulica para facilitar su manejo.
El sistema de frenos contrarresta la aceleración cada vez mayor, impidiendo los accidentes producto de la inercia y el exceso de velocidad. El sistema eléctrico tiene diversas funciones de las cuales las principales es la ignición y la alimentación de la chispa de explosión sincronizada con los movimientos de los pistones alojados en los cilindros (2,4, u 8) del motor combustión interna. El sistema eléctrico se retroalimenta del propio motor accionando un generador que recarga la batería del vehículo.
El sistema motriz se sirve de cuatro elementos para funcionar: 1. La bomba de gasolina, que hace trabajar el motor mismo. 2. El carburador que regula el paso del combustible accionando por la ignición y por el acelerador.
3. El distribuidor que emite secuencialmente la chispa necesaria para producir las explosiones internas de la mezcla gasificada de gasolina y aire. 4. El sistema debe estar bien lubricado con aceites derivados del petróleo resistentes a las altas temperaturas, lo cual hace necesario el enfriamiento que se realiza por agua, aire o por ventilación externa del radiador.
Los motores han tenido diversas colocaciones: al principio adelante, imitando el arrastre de los caballos al frente de las carrozas (no en balde su potencia se sigue midiendo en los caballos de fuerza), experimentando con la colocación trasera con transmisión lateral y, finalmente, el motor transversal delante de la transmisión directa. Desde el modelo clásico de la Wolskwagen inventado por Herr Porsche
Porsche estas experiencias han tenido diversas fortunas.
Como podemos ver las formas del automóvil cambian en sus dimensiones y en sus materiales (metales, aleaciones, fibras, plásticos, pinturas, gomas, etc.); cambian igualmente la organización del trabajo, del diseño y de la producción; los sistemas se simplifican y las innovaciones electrónicas llenan los nuevos modelos de autos de eventuales comodidades y de gadgets (aire acondicionado, aparatos estéreos y ahora compact disc integrado, cristales con elevadores eléctricos, información digitalizada, etc.) Según el perfil de consumidores del mercado al cual está dirigidos.
Esta actividad económica montada sobre un viejo modelo de sistema de transporte privado, originado a comienzos de siglo, ahora, en los albores del nuevo milenio, continúa siendo, como gran industria automotriz, o como múltiples industrias de partes y de servicios, uno de los principales motores de la economía globalizada y fuente fundamental de las transformaciones más radicales de la tecnología, de la organización y de la cultura del trabajo.
Es realmente, la “máquina que transformó al mundo”, en palabras de Womack, investigador de esta industria.
